Ser un proveedor de servicios de salud de confianza, un educador y defensor apasionado en los Estados Unidos, así como un socio sólido para las organizaciones de salud y derechos de todo el mundo.
Planned Parenthood es una organización estadounidense fundada para defender los derechos reproductivos de las mujeres, y con el tiempo se volvió un defensor del aborto legal en aquel país y en otras naciones del mundo.
Actualmente tiene 159 afiliados que operan en más de 600 centros de salud en los Estados Unidos, y mantiene asociaciones con distintas organizaciones en doce países, a las que entrega financiamiento directo.
La organización Planned Parenthood se conformó en 1942, agrupando a las distintas organizaciones que luchaban por la anticoncepción y el aborto.
Sin embargo sus antecedentes datan de los primeros movimientos a favor de la anticoncepción y el aborto, y las clínicas que Margaret Sanger fundó para este fin.
La misma organización no termina de definir en qué año se fundó originalmente. Su página habla de 1916, cuando Sanger fundó la primera clínica de métodos anticonceptivos en Brownsville, Brooklyn.
Otras fuentes refieren que su antecedente es la Liga Estadounidense de Control de Natalidad, fundada en 1921 también por Sanger, como una forma de organizar las clínicas y los distintos movimientos que surgieron durante los primeros años del siglo XXI.
En un principio, Planned Parenthood ofrecía información sobre anticoncepción y planificación familiar, bajo los preceptos del movimiento feminista de la época.
Cuando la ley permitió la distribución de la píldora y otros métodos anticonceptivos, la organización se convirtió en uno de los facilitadores de estos métodos para las mujeres.
Sin embargo, en 1955 comenzaron a plantear el tema de la despenalización del aborto. La directora, Mary Calderone, organizó una convención con médicos para tratar el tema.
Pronto Planned Parenthood se volvió un jugador activo en el tema y comenzó a a trabajar en casos jurídicos que ganaron sus abogados.
Finalmente, en 1970, cuando el aborto fue legal en Estados Unidos, las clínicas de la organización comenzaron a atender abortos, como parte de sus servicios médicos.
Hoy en día, Planned Parenthood es la organización de salud que más abortos realiza en Estados Unidos.
Margaret Sanger nació en 1879 en Corning, Nueva York, en la época en que la anticoncepción estaba prohibida por ley en Estados Unidos y el aborto era ilegal.
Creció en una familia pobre, pero logró estudiar enfermería y comenzó a establecer clínicas privadas que dieron información sobre planificación familiar y a repartir anticonceptivos entre las mujeres más pobres, aunque eso era ilegal.
En su historia se encuentra la apertura de las clínicas, ligas y consorcios que dieron paso a Planned Parenthood, a mediados del siglo XX.
Sanger es considerada una de las primeras feministas de la época. Sin embargo, también ha sido señalada de promover la visión eugenésica que prevalecía entre las familias ricas de Estados Unidos en la década de los 20.
Family Research Council asegura que Sanger abrió todas esas clínicas porque en realidad quería promover la eugenesia.
La eugenesia se veía como un método de control del crecimiento poblacional, en el que se planteaba esterilizar a las mujeres de raza afroamericana o de otras minorías —como las personas con discapacidad— para eliminar a los no aptos.
Las ideas de eugenesia estaban muy implantadas entre las familias ricas de blancos en Estados Unidos, como los Rockefeller y los Ford, quienes veían con terror el crecimiento poblacional en el país y en otras naciones del mundo.
Margaret Sanger tuvo acercamiento con este sector de la sociedad, quienes se encargaron de financiar las primeras ligas, para difundir la anticoncepción, pero también las ideas eugenésicas
John D. Rockefeller Jr y su familia donaron grandes cantidades de dinero para establecer la Oficina de Investigación Clínica, el primer centro de salud autorizado para repartir anticonceptivos y dar asesoría a las mujeres.
Rockefeller siguió apoyando financieramente las causas de Sanger durante los siguientes años, con donaciones muy generosas.
Además, su visión sobre esta ideología fue influenciada por Havelock Ellis y otros eugenistas británicos, sobre todo por HG Wells, quien fue su amigo más cercano.
De hecho, Planned Parenthood publicó en su página web un escrito sobre la ideología que seguía Sanger.
“Sanger creía en la eugenesia, una ideología intrínsecamente racista y excluyente que etiquetaba a ciertas personas como no aptas para tener hijos e hijas.
“Muchas veces, en sus escritos, especialmente en la revista científica Birth Control Review, Margaret Sanger expresó creer y estar de acuerdo con el movimiento eugenésico.
“Ella tenía creencias que, desde el principio, perjudicaron su movimiento por la libertad reproductiva y causaron daño a innumerables personas”, dice el archivo publicado en la historia de la organización.
Ante las evidencias sobre su relación con los simpatizantes de la eugenesia, Planned Parenthood se ha ido deslindando de la imagen de la mujer que fundó las bases de su organización.
“Sanger sigue siendo una parte influyente de nuestra historia y no se borrará, pero a medida que contamos la historia de la fundación de Planned Parenthood , debemos asumir la plena responsabilidad por el daño que Sanger causó a generaciones de personas con discapacidades y negros, latinos, asiático-americanos. y pueblos indígenas.
“Sanger pensó que el control de la natalidad liberaría a las mujeres, y de muchas maneras lo ha hecho (…) revaluar la historia de Sanger no niega su lucha feminista, pero la empaña. En nombre de la conveniencia política, eligió involucrar a los supremacistas blancos para promover su causa. Al hacerlo, devaluó y deshumanizó a las personas de color”, dice una carta escrita por Alexis McGill Johnson, presidenta y directora ejecutiva de Planned Parenthood Federation of America, publicada en el New York Times este año.
Con esta reevaluación, la organización decidió cambiar el nombre de los premios que otorgaban en honor de Sanger, y el centro de salud de Manhattan cambió de nombre en 2020.
Desde 1993 hasta 2018, Planned Parenthood declaró haber realizados poco más de 7 millones de abortos de los 22.3 millones que se realizaron en Estados Unidos y que fueron reportados por los Centros de Control de Enfermedades.
Eso significa que desde 1994, Planned Parenthood realizó 31% de todos los abortos declarados por los sistemas de salud de aquel país. En contraste, Planned Parenthood sólo ha reportado 88.695 adopciones desde 1994.
En sus informes anuales, la organización reporta que solo 3% de los servicios que realiza cada año son abortos. De hecho, en su reporte 2019-2020 señala que esta cifra representan 354,871 abortos realizados durante ese periodo.
Sin embargo, organismos como Family Research Council, consideran que estas cifras son engañosas, pues la organización informa el número de los servicios prestados y no de los pacientes atendidos
“Un paciente puede venir y recibir varios servicios diferentes, como una prueba de embarazo, una prueba de ETS y anticonceptivos, todo en una sola visita. Esto hace que el número de servicios prestados sea mucho mayor que el número de pacientes atendidos”, dice el documento.
En cambio, sí reportaran qué porcentaje de todas las pacientes atendidas se practican un aborto, el numero sería mayor. De acuerdo con Family Research Council, en 2019, el 14% de las pacientes que acudieron a las clínicas de Planned Parenthood tuvieron un aborto; y esta cifra se ha duplicado desde 1994.
El desglose de los diferentes tipos de servicios de Planned Parenthood también revela mucho sobre la historia de la organización.
Planned Parenthood se promociona a sí misma como proveedora de servicios integrales de salud femenina de la mujer.
Family Research Council señala que esto pudo ser cierto entre 1999 y 2004. Pero desde 2005 esto ha cambiado: la organización comenzó a reportar más pruebas para el diagnóstico de enfermedades de transmisión sexual y servicios de anticoncepción, que servicios de salud para la mujer en general.
“Esta tendencia ha continuado, y ahora el aborto, la anticoncepción y las pruebas de ETS representan más del 80% de todos los servicios realizados. Esto significa que los servicios de salud de la mujer, como las adopciones, la atención prenatal, las pruebas de detección del cáncer y los exámenes de la mujer constituyen menos del 20 por ciento de todos sus servicios.
“Planned Parenthood es una organización diseñada para sacar provecho de todos los impactos de la revolución sexual: proporcionar anticonceptivos para todos, y como seguro, proporcionar pruebas de ETS y abortos cuando la anticoncepción o la planificación familiar fallan”, dice el documento del Council.
De acuerdo con su página web, la Junta de gobierno de Planned Parenthood se compone de la siguiente manera:
Ha pertenecido a los líderes de Planned Parenthood desde hace más de 10 años; ha sido presidenta de la Junta de PPFA, miembro de la junta directiva de Planned Parenthood Action Fund y presidenta de Planned Parenthood Federal PAC.
Es una reconocida líder social y de justicia racial que ha trabajado como organizadora política y cultural, además de que ha sido una luchadora incansable de los derechos reproductivos y el acceso a la atención médica de calidad.
Es la co-fundadora y x co-directora del Perception Institute, un consorcio de investigadores, defensores y estrategas quienes traducen la investigación científica de vanguardia sobre raza, género, identidad étnica y otras identidades; tambien es miembro de la junta de Color of Change, Revolutions Per Minute y Narrative Initiative.
Tiene más de 20 años de experiencia en la industria de la salud tanto en el sector público como en el privado. A través de modelos centrados en el consumidor basados en datos y financieramente sostenibles, ha transformado los servicios de salud para varias organizaciones de atención médica. Kulleni también ha desarrollado estrategias para la gestión de la salud de la población y la atención basada en valores que abordan la reforma de los pagos, la alineación de los doctores y la activación de los pacientes.
Se ha desempeñado como miembro de la facultad en educación médica y entrenamiento de residencia en el Centro Médico de la Universidad de Georgetown y en el Hospital de la Universidad George Washington. Kulleni también ha sido una defensora activa de las comunidades vulnerables a través de su trabajo con el estado de Maryland y el distrito de Columbia.
Fue vicepresidenta ejecutiva y jefe de marca de Planned Parenthood Federation of America (PPFA). Durante una década, ha trabajado para fortalecer las conexiones entre los movimientos nacionales y globales y contrarrestar la oposición mundial a la salud sexual, los derechos sexuales y reproductivos. También trabajó para que en el gobierno de Obama se priorizaron estos temas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
Dawn también es cofundadora del Billion Girls CoLab en Nairobi, Kenia, un laboratorio de investigación y desarrollo de derechos y salud sexual dirigido por niñas, en asocio con la compañía de innovación global IDEO.
El modelo de negocio del aborto que Planned Parenthood ha mantenido desde la década de los setenta del siglo pasado se ha financiado con financiamiento del gobierno de Estados Unidos.
Según sus propios registros, Planned Parenthood recibió más de nueve mil millones de dólares en financiamiento gubernamental entre 1994 y 2018.
Y el reporte 2019-2020 señala que ese año recibieron 610 millones de dólares provenientes de Servicios sanitarios del gobierno, reembolsos y subvenciones. Esta cantidad representa 38% del total de sus ingresos anuales.
Sin embargo, los informes no especifican si estos fondos provienen del gobierno federal, de los estados o de los gobiernos locales; solo dan un rubro general.
Los datos recabados por Family Research Council señalan que la Oficina de Rendición de Cuentas del gobierno estadounidense ha entregado reportes sobre el financiamiento que da el gobierno a organizaciones pro aborto.
Según la información obtenida por Council, entre 1994 y 2018, el gobierno entregó 6 mil 150 millones de dólares de los impuestos que pagan los ciudadanos para financiar Planned Parenthood.
En 1994 les dieron 120 millones de dólares; 24 años después la organización recibió 572 millones de dólares. Es decir, el incremento fue de 452 millones de dólares en ese tiempo.
La mayor fuente de financiación federal de Planned Parenthood es Medicaid, el enorme programa de salud del gobierno federal y de los estados, que paga la atención médica de la población más pobre.
Las filiales individuales de Planned de Planned Parenthood realizan servicios de atención médica, como pruebas de ETS, exámenes de cáncer o servicios prenatales para los afiliados a Medicaid.
Los fondos de Medicaid no pueden utilizarse para financiar abortos. Sin embargo, Family Research Council señala que, al liberar gastos con lo que reciben del gobierno, se pueden costear los médicos, fármacos y adquirir infraestructura para atender los abortos.
La segunda mayor fuente de financiamiento gubernamental es el programa de planificación familiar Título X, a pesar de que la ley del Título X establece claramente que el aborto no es un método de planificación familiar. Esto le ha permitido seguir financiando el negocio del aborto.
En 2019, la administración Trump emitió la Regla de Protección de la Vida, con la que se exigió a las clínicas de salud reproductiva que separara los servicios de planificación familiar del aborto; solo así se les entregarían recursos del Título X.
Sin embargo, la organización se negó a cumplir con estos requisitos, sacrificando millones de recursos para atender a sus paciente
Unos meses después, con la llegada del demócrata Joe Biden a la Casa Blanca se anuló la Regla de Protección a la Vida, con lo que se regresó el financiamiento a clínicas que prestan ambos servicios.
Medicaid y el Título X representan aproximadamente el 94% de todos los fondos gubernamentales que recibe Planned Parenthood; el resto son subvenciones federales provenientes de los Servicios Maternos e Infantiles hasta subvenciones no relacionadas con los Departamentos de Agricultura, Seguridad Nacional y Justicia.
Los recursos se han seguido entregado a lo largo de los años, pese a que 58% de los estadounidenses desaprueban que el dinero de sus impuestos se utilicen para financiar el aborto, una práctica que consideran aborrecible, ya sea por sus creencias religiosas, opiniones médicas o la idea de que la vida se protege desde la concepcion y merece ser protegida.
Ante la desparobacion de gran numero de ciudadanos y del grupo de derecha del gobierno, se han promulgado distintas leyes federales y eststales que prohiben financiar el aborto con dinero de los contirubuyentes. No obstante, Planned parenthood sigue recibiendo millones de dólares cada año para financiar servicios de salud y abortos.
Llama la atención que, a medida que el número de abortos de Planned Parenthood aumentaron, también se incrementó el financiamiento gubernamental que recibe la organización.
En 1994, Planned Parenthood informó que había practicado 133 mil 289 abortos y recibió 163 millones del fondo de los contribuyentes. Para 2019, la organización dijo que realizó 354 mil 871 abortos —una cifra récord para ellos—, y recibió 618 millones de dólares de recursos gubernamentales
El crecimiento en el porcentaje de ingresos públicos revela dos cosas interesantes: la primera que es sus ingresos totales han crecido al mismo ritmo que el financiamiento gubernamental
“La creciente cantidad de contribuciones y solicitudes privadas que recibe Planned Parenthood (510 millones de dólares en 2019) ayuda a explicar el mínimo aumento en la proporción de ingresos gubernamentales que Planned Parenthood recibe en un año determinado”, dice Family Research Council"
La segunda observación es cómo utilizan el financiamiento que reciben. Los recursos de Medicaid y Título X se usan para pagar los gastos generados por los servicios de anticoncepción, puruebas de enfermedades de transmisión sexual y otros servicios de salud
En tanto, los abortos se pagan con las contribuciones privadas que reciben y que representan 31% de los recursos que tuvieron en 2019, así como la cobertura de seguros médicos privados o el gasto de bolsillo de los pacientes
Planned Parenthood Federation of America (PPFA) atiende a 600 centros de salud de Estados Unidos, los cuales se encargan de otorgar servicios de salud y programas de salud sexual.
Además, la organización trabaja con más de 100 organizaciones en África y América Latina en temas de derecho a la salud para los jóvenes, las mujeres y sus familias.
De acuerdo a la página web de Planned Parenthood Global, la asociación ha enfocado sus acciones en nueve países: Burkina Faso, Ecuador, Guatemala, Kenya, México, Nicaragua, Perú, Senegal y Uganda.
En el caso de México, la organización explica que durante 9 años ha trabajado con colectivos, grupos, activistas y organizaciones feministas en Yucatán para apoyar el derecho del acceso al aborto, además de aumentar la información sobre derechos sexuales y reproductivos.
La estrategia de la organización incluye también un programa para promover los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, sobre todo después del fallo de la Suprema Corte de Justicia en 2021.
Este fallo decretó que el aborto ya no puede ser considerado un delito y ninguna mujer será encarcelada por abortar.
Además, la asociación civil tiene en marcha la campaña regional Niñas, No Madres, con la que se busca concientizar y educar tanto a la sociedad como a los funcionarios de gobierno, para garantizar el acceso a una atención integral, incluido el aborto.
Planned Parenthood Global también apoya a los socios que brindan servicios de salud sexual y reproductiva, incluidas innovaciones como la telemedicina.
Nuestros socios están creando un ambiente favorable para el aborto legal al capacitar a funcionarios públicos en instituciones públicas para garantizar que se aplique el mandato de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre los objetores de conciencia.